Declaración final de Manifestación

Declaración final para el el sábado 24 de ABRIL de 2010
(para ser leído con megafonía por Almudena Grandes)

De nuevo los españolitos, asustados pero indignados, pocos pero numerosos, pequeños pero enormes, hemos de salir a las calles para clamar por lo evidente, por lo que es justo y razonable y digno, pero que también de nuevo se nos pretende escamotear y negar por parte de la hidra de siete cabezas que dormita, enraizada y venenosa, en la tierra de todos.

Parecería que, ya cumplida la primera década del siglo XXI, y transcurridos nada menos que tres cuartos de siglo desde el fin de la Guerra Civil y más de un tercio de siglo desde la muerte del dictador Franco, no sería necesario tener que volver a salir y gritar por cosas tan obvias como la prevalencia de la libertad y de la justicia sobre la ocultación histórica y el mismísimo fascismo.

Parecería que ya sería evidente, para todos y cada uno de nosotros, que el genocidio no prescribe, que los delitos de lesa humanidad son perseguibles –y deben ser perseguidos– en todo tiempo y lugar, sin fronteras ni leyes nacionales que puedan ocultar o escamotear a los culpables del peso de la Justicia Universal.

Parecería que en España hay libertad y democracia, que la Constitución avala y defiende los derechos humanos y ampara a las víctimas de terrorismo de Estado y de genocidio de Estado.

Parecerían tantas cosas… pero no: estamos en España, la patria doliente de tantos que no se reconocen en ella, que se avergüenzan de mirarla, no digamos de amarla, siempre maltratada y violada por las bestias salvajes y malignas que la historia le ha endosado sin descanso: las bestias del ejército, la iglesia y el dinero, y las bestias de la ignorancia y la corrupción que ellas proponen y diseminan. Para constituir esta España siempre avergonzada e indigna de sí misma, hasta tal punto que nosotros sus hijos, en el día a día, preferimos no mirar tanta ignominia.

Es por todo esto que nosotros los españolitos, aquí nosotros los madrileños, una vez más, hastiados pero firmes, amedrentados pero heroicos, hemos de salir a las calles a gritar nuestra rabia y nuestra vergüenza contra los poderes e instituciones que una vez más pretenden sojuzgarnos, como para rechazar el espectáculo que de nuevo nos obligan a representar ante el mundo civilizado: el de un país diferente, especial, que no enjuicia sus crímenes ni reescribe su malhadada historia, donde los fascistas no sólo no son juzgados y condenados sino que se permiten el sarcasmo histórico de denunciar por prevaricación (¡qué vergüenza!) a un juez valiente y demócrata… para a continuación ser ayudados en tal pretensión por el mismísimo Consejo General del Poder Judicial y por el requetemismísimo Tribunal Supremo, instituciones supuestamente de todos, pero en este caso convertidos en brazos judiciales de un sindicato ultraderechista y de la siniestra Falange de infausta memoria.

Así que aquí estamos, aquí hemos venido, a gritar nuestra rabia y volcar nuestro desprecio sobre unos y otros. Sobre los fascistas y sobre los jueces que les han dado pábulo y acogida institucional. Aquí estamos y hemos venido, a testimoniar y gritar nuestro apoyo y gratitud hacia el juez posiblemente más audaz e íntegro de nuestra historia democrática, el ahora encausado (sí, increíble pero cierto: ¡en-cau-sa-do!) juez don Baltasar Garzón.

En esta nueva ocasión histórica, ni los jueces y demás instituciones, ni los pueblos de España, ni la propia historia, pueden permitir y permitirse tal paso atrás. GARZÓN NO DEBE SER JUZGADO, ni siquiera suspendido temporalmente de sus funciones, por un insidioso y falso delito de prevaricación (¡qué vergüenza!), a instancias de una acusación pergeñada por fascistas e instruida por un juez, Basilio Varela, que no acepta la jurisprudencia internacional y que odia a Baltasar Garzón, ideológica y personalmente.

Es por eso que el pueblo madrileño, ibre e independiente, ajeno a partidos e instituciones, constituido en pura y digna SOCIEDAD CIVIL, llega hasta su Puerta del Sol para exigir y gritar, una (otra) vez más:

¡NO AL JUICIO CONTRA GARZÓN!
¡NO A LA ACEPTACIÓN DE LA QUERELLA DE MANOS LIMPIAS Y FALANGE!
¡NO A LA IMPUNIDAD DE LOS CRÍMENES FRANQUISTAS!
¡NO A OTRO RETROCESO JUDICIAL E HISTÓRICO EN ESPAÑA

y…

¡SÍ AL JUICIO A LOS CRÍMENES FRANQUISTAS!
¡SÍ A LA APERTURA DE FOSAS Y LOS ENTIERROS DIGNOS!
¡SÍ A REPARAR A LAS VÍCTIMAS!
¡SÍ A LA JUSTICIA UNIVERSAL !
¡SÍ A LA DIGNIDAD NACIONAL !

¡JUEZ BALTASAR GARZÓN, ESTAMOS CONTIGO!

…. Y volveremos a estas mismas calles las veces que haga falta, las que sea necesario, para GRITARLO, para EXIGIRLO, para OBLIGAR A CUMPLIRLO.

En la Puerta del Sol de Madrid,
sábado 24, primavera de abril de 2010.

FIRMADO:

LA SOCIEDAD CIVIL MADRILEÑA.
LA SOCIEDAD CIVIL ESPAÑOLA.