Por Dr. Belisario Rodríguez Garibaldo / De El Librepensador
Franco no es sólo asesino. Es genocida y fascista, tal como Hitler. Si se suma a todos los muertos producto de la guerra civil española, especialmente de lado republicano (pero también de lado ‘nacional’); mas todas las fosas comunes e individuales surgidas de la guerra civil española, especialmente de republicanos (tal vez igual de ‘nacionales’); mas todos los muertos por persecución y represalia políticas desde el fin de la guerra civil y transcurso de la dictadura franquista; mas todos los exiliados por la dictadura franquista y todos los emigrados desde la dictadura franquista; finalmente se tiene una sóla cantidad posible de contabilizar: millones.
Franco en España (al igual que Salazar en Portugal) eran tan fascistas como Hitler en Alemania y Mussolini en Italia; pero Franco (y Salazar) no terminaron también siendo juzgados en el tribunal de Nuremberg por crímenes de guerra y contra la humanidad como los lideres nazis, simplemente por que tuvieron la buena decisión (pues no se podía hacer mas por el estado de España al finalizar la guerra civil) de no participar directamente como aliados militares (sólo otorgando apoyo moral y político) del eje de Hitler-Mussolini (eje fascista de Roma-Tokyo-Berlín-Estambul) durante la II Guerra Mundial, lo cual le permitió subsistir en el poder político al fin de la guerra mundial, para luego supeditarse a EE.UU., recibiendo parte de las ayudas económicas del Plan Marshall (EE.UU. a Europa) y aceptando a las bases militares norteamericanas en Torrejón (España). Es lo que le quedaba a los últimos lideres fascistas de la historia, o bien aceptar alianza con EE.UU. o hacerla con la Unión Soviética (que era lo contrario a su fascismo); así mismo ocurrió en Sudamérica, con otros dictadores fascistas (y genocidas violadores de derechos humanos) supeditados a EE.UU. como Pinochet en Chile, Strossner en Paraguay, Videla en Argentina, Trujillo en Dominicana o Somoza en Nicaragua, entre otros muchos dictadores fascistas iberoamericanos.
Mauricio Gabotrit en Memoria e Historia: Relato desde las Victimas afirma que: “La memoria de lo acontecido, además de tener un valor terapéutico colectivo, sienta las bases para un respeto por los derechos humanos, desarma la impunidad y su sistema de privilegios continuados para los verdugos y la prolongada descalificación de las victimas, y, en definitiva, posibilita la institucionalización - por así decirlo - de la verdad.”. Martín Beristáin en ‘Reconstruir el Tejido Social’ plantea que «…para las poblaciones afectadas por la violencia, la memoria histórica tiene el valor de reconocimiento social y de justicia, por lo que puede tener un papel preventivo de secuelas psicológicas negativas, y de prevención de atrocidades en el futuro”»
El autor es Abogado, Sociólogo, Periodista, Analista Político, Profesor y Escritor E-mail: brodgari@hotmail.com
Web: http://www.pa/secciones/escritores/rodriguez_belisario.html
___
Una Guía desorientadora acerca los Padres Fundadores de la mano del Dr. Brion McClanahan / «Target: Patton»: el libro de Robert Wilcox y una meditación poética / Mis poetas contemporáneos: Gustavo Tissoco / Editorial Alebrijes / Yo soy la muerte: Editorial Alebrijes / Red Filosófica de Uruguay
No comments:
Post a Comment